Líderes Con Actitud de Siervos
(3: Continuación)
En otra oportunidad asistí a una “gran conferencia” donde escuché a un predicador muy famoso predicar y no sé por cual motivo, había mucha menos gente de la esperada en un edificio para albergar a miles de personas.
Cuando ese pastor se paró en la plataforma, comenzó a ver los asientos vacíos y dijo con un tono enojado:” - Hermanos, hace mucho tiempo que no le hablo a tan pocas personas. Es un dolor muy grande para mí predicarle a tan pocas personas –“La gente se miraba una a la otra atónita, pues fue una expresión abierta de menosprecio a los pocos que estábamos allí dispuestos a recibir algo de Dios.
Con esas palabras manifestó su altivez y orgullo, pues estaba acostumbrado “solo a predicarle a las multitudes” y se sentía “humillado” de predicarle a tan poca gente. ¡Qué Dios nos guarde de actitudes como estas, que frenan literalmente el fluir de Su Gloria!
Otras veces nos encontramos con ministros que “porque son famosos", ya no se puede hablar con ellos directamente sino a través del filtro de dos o tres secretarias. Cuando uno los busca para hablar, no atienden sus teléfonos personales y se mantienen con una actitud distante, como considerándose “mejor que nosotros”.
Es tiempos que se terminen este tipo de actitudes que pertenecen más al mundo de la farándula que al Reino de Dios. ¿Entiende ahora por qué la Gloria de Dios no tiene lugar para derramarse?
Miren lo que dice la Biblia:
Salmo 19:12-13: “¿Quién podrá entender sus propios errores? Líbrame de los que me son ocultos. Preserva también a tu siervo de las soberbias; Que no se enseñoreen de mí; Entonces seré íntegro, y estaré limpio de gran rebelión.”
Proverbios 16:18 “Antes del quebrantamiento es la soberbia, Y antes de la caída la altivez de espíritu.”
Cuando empezamos a considerarnos que somos “más especiales” que los demás por cómo predicamos o por el edificio que tenemos o la gente que sigue nuestro ministerio, estamos en serios problemas, aunque sigamos haciendo lo que hacemos y veamos resultados. Cuando nos sentimos mal por predicar en lugares pequeños o a un grupo de personas, definitivamente algo no está bien en nuestro interior. ¡Guárdanos Señor!
3. La ostentación – gloriarse –
La ostentación y el gloriarse a sí mismo está muy relacionado con el orgullo, la altivez y la soberbia, y en realidad con todos los otros puntos mencionados.
Muchas veces cuando Dios nos respalda y nuestro ministerio impacta y bendice, podemos caer en el riesgo de pensar que ha sido por causa nuestra o por nuestra habilidad en vez de la Gracia de Dios. Cuando creemos que “somos algo”, estamos cayendo en la ostentación y el gloriarse a uno mismo.
Ya sea que tengamos libros publicados, una agenda muy completa para predicar en diferentes ciudades del mundo, aparezcamos en la televisión, hablemos en la radio a nivel internacional, tengamos gracia para predicar, enseñar o echar fuera demonios, o seamos los pastores de la iglesia más grande de la ciudad, debemos siempre recordar que nos es por causa nuestra sino por la Gracia y favor del Señor.
Miren lo que dice la Biblia:
1 Corintios 1:25-31
25 “Porque lo insensato de Dios es más sabio que los hombres, y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres. 26 Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; 27 sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; 28 y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, 29 a fin de que nadie se jacte en su presencia.30 Más por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención; 31 para que, como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor.”
2 Corintios 10:17-18
“Más el que se gloría, gloríese en el Señor; 18 porque no es aprobado el que se alaba a sí mismo, sino aquel a quien Dios alaba.”
¿Puede entender que nuestras actitudes negativas, que no son otra cosa que nuestra carne no quebrantada, son un impedimento para que la Gloria de Dios se manifieste?