La Ley de Restitución en la Palabra de Dios
(3: Continuación)
Esta autoridad viene a través del poder del acuerdo, al menos entre dos personas (Mateo 18:19). Esta clase de oración no es individual sino grupal. La oración de acuerdo, hecha con autoridad celestial va a maniatar, atar al poder del enemigo. Recuerde que para poder recuperar lo perdido por causa del maligno, debemos operar con determinación y una acción de fe fuerte y valiente en Dios en compañía de otros que crean lo mismo que nosotros (Marcos 3:27).
Si no tiene a algún familiar cristiano para orar con él, busque el apoyo de los hermanos de la congregación. Si usted es un pastor, haga este acto en su congregación, previamente habiendo instruido al pueblo con lo que le acabamos de enseñar. ¡La oración junto con otros hermanos en la fe produce resultados gloriosos!
Cuando Israel (lea Éxodo 17:8-16) estaba luchando contra los Amalecitas y Moisés estaba en la cumbre del collado con los brazos en alto con la vara de autoridad de Dios, el pueblo ganaba. El relato dice que al cansarse Moisés, el pueblo comenzaba a perder la batalla (v.11), pero gracias a la ayuda de otros como Aarón y Hur que sostenían sus brazos en alto, Israel pudo ganar la batalla (vv.12-13).
Debemos darnos cuenta que necesitamos de la ayuda espiritual de otros, en acuerdo, para ganar nuestras batallas contra los enemigos de Dios. No le pida ayuda a aquellos que no creen ni estén de acuerdo con usted, busque personas llenas del Espíritu Santo y de fe.
3. DETERMINE LO QUE VA A RECUPERAR EN EL NOMBRE DEL SEÑOR
Volviendo al pasaje de Éxodo 22, donde se detalla la ley de restitución, cuando el ladrón era atrapado, debía retornar todo lo robado, más los intereses. Allí se mencionan varias clases de intereses. En el v. 1 se menciona que si alguien ha robado un buey se debía devolver cinco bueyes. Esto es un interés del quinientos por ciento; si se robaba dinero, el interés era del cien por ciento, pero si miramos en Proverbios 6:30-31 vemos que el interés es del setecientos por ciento.
La razón es que cuando se escribió originalmente la ley, la sociedad era principalmente rural. Con el paso del tiempo al escribir Salomón el libro de Proverbios, la sociedad se había movido mayoritariamente hacia las ciudades, dando lugar a la cultura urbana, donde el dinero era más importante para poder vivir y los intereses eran más altos. Basados en esto, antes de reclamar lo que ha perdido y recuperarlo con intereses, es necesario hacer un acto de fe. Tome un papel y lápiz y haga memoria de lo que le ha sido robado o ha perdido y escríbalo detalladamente. Luego al valor original, de lo que ha perdido, súmele el setecientos por ciento de interés (multiplíquelo por siete). ¡Créale a Dios que ese es el total de lo que usted va a reclamar y recibir en el Nombre de Jesús!
4. ACTUE EN FE Y RECIBA POR FE
Con la lista en su mano, fe determinante (y con al menos otro creyente de acuerdo con usted) y creyéndole a Dios comience a tomar autoridad sobre el enemigo y diga a viva voz: - ¡Diablo mentiroso y engañador, por mucho tiempo me has robado y me has quitado cosas que no te pertenecían! Tú has sido el verdadero ladrón de mis bendiciones, por eso hoy te declaro como el único culpable de todo esto. A partir de ahora no toleraré más tus amenazas de que seguirás robándome. Por eso, a partir de este momento congelo tu obrar destructor y en esta hora aplico en el mundo espiritual la ley de restitución sobre mi vida. ¡Te ordeno en el Nombre de Jesús que sueltes y devuelvas con un interés, del setecientos por ciento, todo lo que me has robado, y además cancelo e impido toda futura acción de robo contra mi vida! ¡Lo declaro hecho en el Nombre de Jesucristo a partir de este momento! Comience a alabar al Señor por su misericordia restauradora, y manténgase creyendo expectante que Dios cumplirá Su Palabra.
5. UTILICE LA PROTECCION DIVINA DE AHORA EN ADELANTE
Dios no sólo quiere que reclamemos lo que el enemigo nos ha robado, con intereses, sino que también tiene un plan especial de protección contra el ladrón, el diablo. En Efesios 6:1-18 encontramos detallada la armadura de Dios para el creyente en Cristo. Allí se detallan seis pasos para obtener cobertura espiritual contra las fuerzas de maldad:
a) En 6:14 leemos “ceñidos vuestros lomos con la verdad” En la Corte de Dios siempre triunfa la verdad. Jesucristo es la verdad (Juan 14:6). Si usted no se mueve en la verdad de Dios dejara la puerta abierta para que el ladrón vuelva a entrar y hacer de las suyas. Camine en la verdad de Dios cada día.